Trastornos del sueño en personas mayores: causas y síntomas

Publicado:
 •
Share

Familia
Sueño
Insomnio

Trastornos del sueño en personas mayores: causas y síntomas – Adeslas Salud y Bienestar

En este post vamos a explicar las principales causas de insomnio en las personas mayores, cuáles son sus síntomas y cómo evitar estos trastornos del sueño.


El insomnio es un problema de salud muy prevalente en la sociedad actual y se observa con mayor frecuencia en mujeres, personas de edad avanzada y personas que padecen otras patologías. Los patrones de sueño suelen cambiar con el paso de los años, especialmente en las personas mayores, que suelen tener mayor dificultad para conciliar el sueño, se despiertan más a menudo durante la noche y suelen madrugar más. Esto provoca que pasen menos tiempo durmiendo profundamente y sin soñar, y sientan que tienen un sueño más ligero2.

Qué es el trastorno del sueño en personas de edad avanzada

Aunque se recomienda que los adultos duerman entre 7 y 8 horas todas las noches, las alteraciones del sueño son muy frecuentes entre las personas mayores, y los problemas más comunes en esta población son la dificultad para conciliar el sueño, el sueño más ligero o el sueño entrecortado, que dificultan el descanso nocturno y generan cansancio diurno, irritabilidad y/o pérdida de memoria3,4.

Generalmente, los ciclos del sueño duran entre 90 y 110 minutos, y es necesario completar al menos 4 ciclos durante una noche para garantizar el descanso. Cada ciclo de sueño se compone de varias fases1,3,5:

  • Fase NMOR (sin movimientos oculares rápidos): también conocida como sueño profundo. Representa el 75 % del sueño y es la etapa que facilita el descanso corporal. Se compone de cuatro etapas diferenciadas por la profundidad del sueño:
    • Etapa I (etapa de transición): etapa de sueño muy ligero, con cabezadas y de corta duración, en la que es fácil despertarse por cualquier estímulo sensorial. En las personas mayores, esta etapa supone un 12-15 % debido a que se despiertan con más frecuencia durante la noche.
    • Etapa II (sueño superficial): dura en torno a 10-15 minutos, el sueño es algo más profundo y es una extensión de la primera etapa. En esta etapa, la respiración, el movimiento de los ojos, los latidos del corazón y la actividad muscular se vuelven cada vez más lentos.
    • Etapa III (sueño profundo): dura entre 15 y 30 minutos. En esta etapa, la actividad cerebral y la frecuencia cardiaca y respiratoria se ralentizan, y los músculos están completamente relajados. En este momento resulta más difícil despertar a la persona y raramente se mueve.
    • Etapa IV (sueño profundo): dura también entre 15 y 30 minutos. Es la etapa de sueño más profunda, lo que hace difícil despertarse, y es el periodo en el que se produce la recuperación física. En esta etapa puede aparecer el sonambulismo y enuresis (mojar la cama).
  • Fase MOR (movimientos oculares rápidos): constituye el 25 % del ciclo del sueño y se inicia unos 90 minutos después de haber conciliado el sueño. La duración de esta etapa aumenta con cada ciclo, aunque la duración media es de 20 minutos. Es cuando se producen los sueños más vívidos. En esta etapa es difícil despertar a la persona.

Causas del trastorno del sueño en las personas de edad avanzada

Los trastornos del sueño en las personas de edad avanzada pueden producirse por1,3:

  • Alzheimer: algunas áreas del cerebro que regulan el sueño y la vigilia se ven afectadas por la enfermedad, provocando alteraciones, especialmente en las fases iniciales de la enfermedad.
  • Alcohol: altera las fases del sueño y hace que el descanso sea menos satisfactorio.
  • Síndrome de apnea obstructiva del sueño.
  • Problemas neurológicos y cardiacos: el sueño es normal en cantidad y duración, pero tiene lugar a una hora tardía, lo que se denomina como retraso de fase del sueño.
  • Algunos medicamentos estimulantes o antidepresivos: las alteraciones del sueño son uno de los efectos adversos más frecuentes de ciertos medicamentos.
  • Trastornos del estado de ánimo: ansiedad, preocupación, angustia, miedo o tristeza pueden provocar insomnio crónico.
  • Dolor causado por otras patologías: síndromes dolorosos, infecciones, enfermedades metabólicas, etc.
  • Cafeína y nicotina: alteran el sueño a causa de sus propiedades estimulantes o depresoras.
  • Nicturia: tener que orinar frecuentemente durante la noche.
  • Fibromialgia: los pacientes presentan cansancio y fatiga persistentes, que se asocian a un sueño no reparador.
  • Síndrome de las piernas inquietas: movimiento periódico de extremidades que afecta a la calidad del sueño.

Recomendaciones

Para mejorar la calidad del sueño, se recomienda2,3:

  • Evitar consumir comidas copiosas antes de acostarse.
  • No tomar cafeína en las 3 o 4 horas anteriores a la hora de irse a dormir.
  • No hacer ejercicio por la noche.
  • Mantener un horario regular.
  • No hacer la siesta.
  • Evitar las pantallas y los aparatos electrónicos antes de ir a la cama.
  • No fumar, especialmente antes de ir a dormir.
  • Evitar el uso de somníferos, ya que pueden generar dependencia. Aunque en este caso siempre es conveniente consultar con el médico antes de empezar a tomar o dejar este tipo de medicación.

En caso de no poder conciliar el sueño pasados 20 minutos, levántate y realiza actividades como escuchar música o leer2,3.

Cerca del 50% de la población padece insomnio, por lo que, si consideras que tu patrón de sueño ha empeorado en los últimos años, acude al especialista para que te ayude a regularlo.

Además, si eres asegurado de Adeslas, recuerda que tienes disponible nuestro Plan de Sueño, donde podrás obtener más información.

 

Referencias:

1 Alteraciones del sueño en personas adultas mayores. Facultad Medicina de la UNAM. Febrero, 2018.

2 Cambios en el sueño por el envejecimiento. Medline Plus. Julio, 2020.

3 Trastornos del sueño en los ancianos. Medline Plus. Julio, 2020.

4 Trastornos del sueño. SEGG. Consultado en octubre, 2022.

5 Las fases del sueño: NREM Y REM. Ambiente idóneo y beneficios para la salud. Elsevier. Junio, 2019.